El agua es esencial en nuestro día a día. Da vida, pero también la quita si sus condiciones no son las adecuadas para el consumo humano. Gran parte de los habitantes del planeta tienen a su alcance agua potable. Sin embargo, todavía son muchos los países que no gozan en la actualidad de suministros de agua potable.
En África y en algunos países de América Latina ya se llevan años sufriendo esta lacra, y es que el agua sin tratar puede ser un foco de infecciones. Hoy, te contamos cuáles son las 5 enfermedades que puede provocar el consumo de agua contaminada en el mundo y cómo puede tratarse el agua para evitarlas.
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¿Qué es la contaminación del agua?
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS) se considera agua contaminada a aquella que ha experimentado cambios en su composición, hasta el punto de no ser adecuada para su consumo humano.
Se trata, por tanto, de agua con un alto nivel de toxicidad, inservible tanto para su ingesta por los humanos como para su uso en actividades de carácter esencial como la agricultura.
Este problema tiene un alto impacto en todo el mundo, y es que las muertes por agua contaminada alcanzan las 500.000 al año, debido a sus condiciones insalubres. Uno de los síntomas más comunes es la diarrea por agua contaminada pero, si quieres saber qué más riesgos tiene consumir agua contaminada para la salud, sigue leyendo.
¿Qué enfermedades puede causar el agua contaminada?
La falta de un servicio de saneamiento de aguas hace que muchas personas tengan que recurrir a arroyos, pozos o lagos para poder obtener este líquido. Este agua puede suponer un verdadero peligro para quien la ingiere y es que, que no esté tratada supone un grave riesgo para la salud.
¿Qué enfermedades se pueden transmitir mediante el agua? Por desgracia, no son pocas las consecuencias del agua contaminada en el ser humano por su consumo.
Cólera
El cólera está causado por la ingesta de alimentos o de agua contaminados por la bacteria Vibrio cholerae. Entre los principales síntomas por agua contaminada de esta enfermedad están las diarreas intensas y la rápida deshidratación de los individuos.
Aunque puede parecer una enfermedad leve, lo cierto es que es una de las infecciones bacterianas que más mortalidad produce en países sin acceso al agua potable. De hecho, según los datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), cada año mueren entre 21.000 y 143.000 personas a causa de esta enfermedad.
África, Haití o países del sudeste de Asia son parte del foco principal donde esta enfermedad, prácticamente epidémica, representa un verdadero riesgo para sus habitantes.
Amebiasis o Disentería Amebiana
Otra de las enfermedades que afectan al aparato digestivo de las personas es la amebiasis o disentería amebiana. Producida por la bacteria Shigella, esta enfermedad se transmite a través de las heces.
De hecho, es muy común su transmisión en guarderías o escuelas infantiles, donde el personal manipula los excrementos de los niños sin apenas tomar medidas de higiene. Sin embargo, esta enfermedad también puede transmitirse mediante el consumo de agua o de alimentos.
En este sentido, el agua se contamina con esta bacteria debido a la presencia de aguas residuales. Los alimentos, por su parte, se contaminan si su cultivo se produce en un campo donde existan aguas residuales.
Los síntomas de esta enfermedad son similares a los del cólera, a los que se suma dolor abdominal, fiebre y escalofríos. Además, en muchas ocasiones las heces pueden contener incluso sangre, pus o mucosidades.
Fiebre tifoidea
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), cada año fallecen en el mundo entre 128.000 y 161.000 personas a causa de la fiebre tifoidea. Está enfermedad infecciosa tiene su origen en la bacteria Salmonella typhi, la cual se transmite mediante la ingesta de agua o alimentos contaminados. Una vez dentro del cuerpo, se multiplica y se extiende rápidamente por el torrente sanguíneo.
Sus síntomas más habituales son fiebres prolongadas, cefaleas, cansancio, dolor abdominal, náuseas y estreñimiento o diarrea. Como el resto de enfermedades provocadas por el consumo de agua contaminada, esta enfermedad puede ser mortal si no se trata a tiempo.
Aunque tiene un fácil tratamiento con antibióticos, lo cierto es que cada día es más complicada de curar, ya que esta bacteria resulta resistente a ellos. Para lograr una mayor inmunidad, existen en la actualidad dos vacunas diferentes para garantizar la prevención de esta enfermedad.
Poliomielitis
Aunque no es lo más frecuente, la poliomielitis puede tener como foco de contagio el agua o alimentos contaminados por este virus. Se trata de una enfermedad muy contagiosa, que afecta sobre todo a los menores de 5 años.
Este virus invade el sistema nervioso de los afectados en cuestión de horas, teniendo como síntomas principales la fiebre, cefaleas, vómitos, cansancio, dolores en las articulaciones y rigidez del cuello. En 1 de cada 20 casos puede producir, además, una parálisis irreversible en las piernas y llegando incluso a provocar la muerte en hasta un 10% de los casos por parálisis de los músculos respiratorios.
Su prevención es clave, y es que basta con que haya únicamente un caso activo para que la infección se propague sin control. Desafortunadamente, la poliomielitis no tiene cura en estos momentos, aunque las vacunas antipoliomielítica se han convertido en un arma eficaz para su prevención.
Hepatitis A
El virus de la hepatitis A (VHA) produce la inflamación e irritación del hígado a aquellas personas que ingieren alimentos o agua contaminados por las heces o la sangre de personas infectadas.
Normalmente, esta enfermedad se produce entre personas que nunca se han infectado ni vacunado, y es que esta enfermedad produce inmunidad una vez se produce la recuperación. Además, suele producirse la infección durante la infancia, debido a saneamiento deficiente o a la carencia de agua potable.
Actualmente, su mortalidad es muy baja, ya que en muy pocos casos la enfermedad se complica. A pesar de estos positivos datos, en algunos casos puede provocar debilidad e incluso ser una hepatitis fulminante.
¿Cómo descontaminar el agua contaminada?
¿Qué se puede hacer con el agua contaminada? Gracias a los avances tecnológicos, actualmente existen mecanismos con los que se puede conseguir eliminar gran parte de las bacterias en el agua contaminada. En Dioxilife luchamos por conseguir que el agua limpia sea accesible para todos. Para ello contamos con productos como nuestro filtro de agua personal.
Este filtro de reducido tamaño permite ser transportado a cualquier parte, proporcionando agua potable gracias a su potente sistema de filtración. Con él, se consigue eliminar del agua el 99,9% de las bacterias, como la Escherichia coli, ayudando a la prevención de enfermedades por agua contaminada como el cólera o la fiebre tifoidea.
No es el único producto para la filtración del agua, y es que en nuestra tienda online contamos con filtros para grifo o para la ducha. Además, disponemos de un kit potabilizador, con el que potabilizar y desinfectar el agua para consumo humano, y es que contar con un agua de calidad nos hace estar mucho más sanos.
Las consecuencias de beber agua contaminada pueden ser muy graves por lo que, si tienes alguna pregunta, no dudes en ponerte en contacto con nosotros. Te responderemos lo antes posible, brindándote la atención personalizada que mereces.